La memoria pierde fuerza, pierde brillo, pierde sentido…
Y el tiempo pasa y marca la pauta…
Mientras yo ando en todo y no ando en nada.
Y olvido cosas importantes, imágenes, sonidos…
Y recuerdo lugares en los que nunca he estado, salvo en mi imaginación… y eso es bien extraño.
Mientras voy sacando mi desazón en puñados pequeños y voy amontonándolos en el teclado como si fuese un ejercicio de memorización…que no logro resolver sin mirar a escondidas el resultado.
Y reconozco que estos lapsus, en según que momentos… me hacen mas bien que mal, porque no almaceno el rencor y me cuesta horrores mantener un enfado cuando he olvidado el motivo del mismo…
Pero en tu honor, en tu memoria y en la mía, siento pena y siento olvido, porque con el paso de los años, sin quererlo es como que te voy olvidando…
Ya apenas recuerdo tu voz, tu risa, tu fanfarronería, tus chistes, esa dulzura que siempre intentabas esconder pero que yo te sacaba aunque te daba rabia…
Cada día que pasa estas un poquito más lejos…
Cada día que pasa yo estoy un poquito más cerca…
Mientras este tira y afloja nos hace mantenernos en el mismo punto sin avanzar pero retrocediendo sin que nos demos cuenta.
Y a tu favor, tengo que decir, que hay una cosa que no ha cambiado muy a mi pesar.
Es tu cara.
Te mantienes joven siempre. No has envejecido. Como plantándole cara al mundo para tu regocijo pero con la faz seria y los ojos cerrados, aquellos ojos tan verdes y tan lindos que ya nunca más he podido contemplar.
Y digo muy a mi pesar, porque esa estampa si que me resulta imposible olvidar.
Siempre te recuerdo en una caja de madera a través de un cristal y rodeado de flores y demasiado inmóvil…
No debería haberte visto así por mi propio bien… porque ese es el ultimo recuerdo que tengo de ti… y me entristece cada día de mi vida.
Pero seguro los recuerdos del corazón siguen intactos.
ResponderEliminarUn abrazo
Intactos del todo. Si. Un beso grande.
EliminarYo creo que la memoria, o la falta de ella, es aliada nuestra. Se va borrando para permitirnos seguir adelante, y siempre deja intacto, si no el recuerdo concreto, sí las sensaciones. Y supongo que es justo y necesario que sea así.
ResponderEliminarConmovedor tu texto
Hoy, además de un beso grande, te dejo un abrazo apretado
Gracias bonita. Cuidado, que no te suelto...eh?... :)
EliminarUn beso enorme
Tu relato me ha tocado fibra, Laura... comparto ese final, nunca debí ver a alguien que quiero mucho (vive en mí) de esa manera, intento buscar otros recuerdos y sin embargo...
ResponderEliminarUn abrazo inmenso para ti y feliz noche.
Decisiones que nos acompañaran toda la vida. Besos
EliminarAsi pasa muchas veces amiga.....pero el tiempo ira pasando, y los mejores recuerdos los llevas en el alma, saludos a la distancia.
ResponderEliminarUn beso Sandra. Grande, grande....
EliminarQue tremendo es ese final, no me lo esperaba y me has dejado un poco frío. Es cierto que hay cosas que no deberíamos ver jamás pera que no nos persigan el resto de nuestra vida pero, una vez cometido el error, cambiemos el chip y pensemos algo así como "al menos pude verlo antes de marcharse".
ResponderEliminarMuchos besos!!
Ese es el consuelo Antonio. Siento haberte dejado frío. Un abrazo (calentito).
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