Podría bajo esquemas,
organizarme como de costumbre,
papeles en blanco
que llenan de palabras mi memoria…
Quizá la mente…
quizá…
el sistema,
que esta vez sin computar
suma y sigue sin recordar,
cuantas fueron
ni cuantas serán…
las veces
que llegue a alcanzar
eso que llaman
felicidad.
Por una vez en mi vida,
decidí no pensar,
decidí no darle vueltas
a lo que esta bien o mal,
decidí jugar,
sin más.
No tuve remordimientos,
no necesité respuestas a mis no preguntas,
porque ni tan siquiera me las cuestioné…
Decidí sobre la marcha,
en el preciso y justo momento,
guiada por la apetencia
de la simpleza de mi cuerpo.
Ese cuerpo que reumático
a temprana edad,
se oxidaba aún medicándose
contra su voluntad…
mientras el dolor era latente
a la vez
que visible…
en esa extraña enfermedad,
aún sin catalogar…
llamada…
Mal de amar.
Y desnudé la cabeza de velos,
desvestí también el cuerpo
y
desnuda
por completo,
lubriqué con aceite
las esquinas…
todos…
mis recovecos,
hasta conseguir
un funcionamiento casi perfecto…
de aquello que aprendí una vez
y que no olvidé con el tiempo.
Puesta a punto en tacto, gusto y sentido.
En alma, corazón y vida.
Motor en marcha,
en constante movimiento.
Y que sin hacer ruido,
me lleva a ti…
y me trae de vuelta
a mi…
sin pasar por otro sitio.
Caminos de ida
caminos de vuelta,
sin preguntas formuladas
que nazcan de la duda
quizá interpuesta
o
quizá existencial…
Por lo ya vivido
o
de lo que esta por llegar.
Tranquilidad.
Por fin,
tranquilidad.
Menuda extraña sensación esta…
que se ha acomodado en mi casa…
que como vestida de domingo,
en zapatillas y pijama
me habla entre susurros
y
me da los buenos días
casi
cada
mañana.
Podría decir mucho más
como también podría…
sentir mucho menos.
Pero de podrías,
he vaciado mi vida…
con intentos de avaricia,
con mucho de empeño,
solo quiero
llenarla
de infinitas alegrías.
Esas que me pide el cuerpo.
Esas que me ofrece la vida.
Esas que me das tú…
sin apenas esperar
y
sin pedir nada a cambiar.
Aun recuerdo mis palabras
diciendo “no es el momento”,
maldita bastarda
soy
y
me siento,
al recordar al rescatado recuerdo
de intentar negarme a mi misma
lo bueno,
por creer simplemente,
que no lo merezco.
llenarla de alegrías :) ojalá así sea :)) un biquiño de boas noites :))
ResponderEliminarJODER!!! te sales!
ResponderEliminarque grande....
IM-PRE-SIO-NAN-TE...uf,uf,uf....
ResponderEliminarcada vez me dejas más boquiabierta!!
"Pero de podrías,
he vaciado mi vida…
con intentos de avaricia,
con mucho de empeño,
solo quiero
llenarla
de infinitas alegrías"
_Alegrías es lo que te mereces...eso y más!!!!
Olga "H"...mil besos!!
Ay, encanto, pues en realidad ya salí del mal momento.
ResponderEliminarPasé por una crisis con alguien a quien quiero mucho y las cosas, por un momento, se salieron de control.
Pero no te preocupes: ya voy viento en popa. Mucho más tranquila y mejorada.
Tú también tienes una amiga conmigo, no lo dudes. Aunque esté en otro continente, eso es lo de menos.
También noté mucho dolor en tu texto, ¿estás bien?
Miles de besos, ¡guapa!
Recuerdos.
ResponderEliminarAfinan tus letras en mi oído.
Saludos.
Suerte que ya es sólo un recuerdo. Nos merecemos lo bueno y lo mejor. ;) besos
ResponderEliminarAquí y ahora. Sin culpas ni permisos.
ResponderEliminarDisfruta.
un beso
increíble, a mí me has roto los esquemas. muás
ResponderEliminarTus palabras perfectamente enlazadas, me encanta.
ResponderEliminarbesos
Es buenísimo! Me ha encantado Laura... de verdad, te ha quedado increíble, el fondo la forma y todo!
ResponderEliminarun millón de besos ácidos
claro que sí, fuera todos esos "podría".
ResponderEliminarComo siempre, y para no variar, me voy de tu blog con buen sabor de boca :)
Muac!
El peor de los males. El mar de amores y sus recuerdos.
ResponderEliminarDemasiado complicado.
B-sos!!
Simplemente bellísimo. Yo también debería lubricar con aceite
ResponderEliminarlas esquinas de todos mis recovecos.
Tienes un lenguaje y una narrativa perfectos.
Un abrazo
Marlene
Espero que todo eso que vomitas, sean únicamente sentimientos encerrados que necesitan salir y que no son autobiográficos.
ResponderEliminarEs precioso, pero se me encoje el corazón al leerlo...
Besos sensibles
Laura por dios!!! como lo haces? es increiblemente bello!!! alucinante, apabullante, desmesurado...
ResponderEliminardebemos de ser tan sumamente racionales y mas pasionales...
ResponderEliminarbesotes de esta peke.
pd. te espero por mi rincon con tu taza de cafe, siempre que quieras...