Romper el silencio no es más,
que romper los labios,
sin necesidad de sangrar.
Labios cortados,
resecos,
agrietados ante la escasez de agua,
por culpa de una saliva convertida en ácida que al ser tragada,
se vuelve corrosiva dentro de la garganta.
Ansias,
tras tus dedos,
impaciencia,
tras tus pasos.
La semana de sequía,
llega a su fin,
te encuentra,
bebe, se sacia de ti.
El cuerpo se eriza,
a escondidas,
no pide permiso,
mientras tirita.
Me acostumbro rápido al tacto,
ese que desprende tu piel,
mientras haces del frío calor,
derritiendo mi ser.
Hoy me amas como nunca antes lo hiciste,
hoy desvanezco como nunca antes pensé que pudiese llegar a hacerlo…
Hoy todo lo dicho, lo pensado, lo vivido,
es solo el principio…
de esa historia a la que llamamos nuestra,
esa que hace de mi,
lo que ahora mismo soy…
un ave de vuelo inerte,
que busca nido en tu corazón.
El fin de semana alguién me dijo lo mucho que le agradaba el calor en los labios, la sangre en ellos, tu entrada me lo recordó.
ResponderEliminarUn beso hermosa, ¿cómo andas?
¿Dónde está la opción "Me encanta"?
ResponderEliminarEs increíble :)
se te echaba de menos, vecina del ártico...
ResponderEliminar;D
Los principios son geniales y tu manera de transmitirlo, más.
ResponderEliminarBesos!
Bonitas palabras.
ResponderEliminarSaludos
Un ave de vuelo inerte, buscando un nido en tu corazón.
ResponderEliminarPrecioso, sin más, precioso.
Y como expresas el sentimiento a través de tus letras, la sensación del cuerpo y penetra en tu interior, increible y precioso.
un ave de vuelo inerte,
ResponderEliminarque busca nido en tu corazón.
Precioso, sin más, precioso.
Como expresas las sensaciones de tu cuerpo a traves de las palabras y como éstas penetran en los sentimientos en tu interior.
Increible.