tiempo

Debe ser cuestión de tiempo...o quizá tan sólo de experiencia, quizá no es cuestión de nada, y sólo lo es de la casualidad...quizá yo busco respuestas a todas mis preguntas dónde quizá ni siquiera las hay...
Quién puede acallar mis dudas, quién puede tranquilizar la sensación de ignorancia que a veces siento.
Me encuentro ante un mundo desconocido, un mundo lleno, en ocasiones...de nada, un mundo en el que a veces no encuentro el rumbo.
Pienso en mi edad, y en la importancia que tienen para mi, montones de palabras, gestos o sentimientos que describo y siento.
Me siento infantil por creer que con mis manos puedo cambiarlo todo, por creer que en mi poder tengo la felicidad conquistada... por sentir que en mi interior, nace día a día una magia invencible, por creerme la dueña de mi mundo, ese que creé un día hace ya mucho tiempo...en fin, me siento infantil porque para mi suerte, lo soy.
Miro, observo...y no hablo, prefiero aprender de lo que veo, sin necesidad de opinar acerca de lo que no sé...que perdida de tiempo, hablar por hablar.
En mi interior, a veces descubro ante mi enfado, que quizá no soy tan niña como realmente me gustaría ser, que mi mente y mi cuerpo, sin darme cuenta creció...
Y así me encuentro hoy...
Sintiéndome una niña atrapada en un mundo de adultos, una niña que necesita jugar, sin pensar en más...una niña que necesita crear un mundo de cristal dónde esté prohibido llorar...
Viviendo a mi manera, sintiéndome llena, queriendo aprender cada día algo más, deseando no dejar de soñar...
Que el mundo en el que vivo no deje jamás de girar...y que yo, desde fuera...pueda seguir diciendo: ver, oír y callar.