No sé cómo agradecer tanto cariño sin sonar repetitiva y no encuentro las palabras precisas para expresar lo que siento cada vez que oigo uno de mis poemas con vuestra voz. Es una sensación única, tan inmensa y reconfortante que no puedo dejar de darle al play una y otra vez y de emocionarme con cada escucha.
Este es un poema largo y todos andamos escasos de tiempo. A los que os detengáis y nos dediquéis nueve minutos de vuestra vida, Auroratris y yo os dedicamos la mejor y mayor de las sonrisas.
Gracias por tanto.