En
aquella habitación eran muchos los elementos suspendidos en el aire.
La
mayoría palpables, pero algunos no.
Las
partículas que deja en el aire el olvido y el recuerdo también.
La
frialdad que habitaba tu lado de la cama o aquel truco de magia que aprendí
(y
que ahora ya no me sale) en el que podía verte aun con la luz apagada.
La
cercanía de una voz que no hacía más que alejarse…
O
aquel primer rayo de luz que siempre amanecía más tarde que yo y que me cruzaba
la cara tras el insomnio de una noche demasiado larga.
En
aquella habitación, no
sé cómo explicarlo…
el aire se me acababa, pero no me asfixiaba.
Ni
a 10.000 kilómetros conseguí alejarte más de lo que estaba yo de todo, hasta de
ti.
Pero
en aquella habitación encontré la forma de ausentarte (aunque fuese sólo por
pequeños instantes) y de no perderme yo de tanto buscarte…
Incomprensiblemente,
allí sentía que estaba protegida, quizá de ti y puede que hasta también de mí. Y
aunque parezca mentira, en aquella habitación fui feliz.
Es verdad, esa memoria está ahí, el dolor también, me pregunto si van unidos.
ResponderEliminarBesos.
Amapola Azzul, yo diría que sí, depende del carácter de cada uno. Besos.
EliminarLetras llenas de recuerdos y ternura.
ResponderEliminarUn abrazo.
Rafael, me alegra que así lo veas. Esa era mi intención. Besos.
EliminarLas vivencias nos acompañan siempre, por lejos que vayamos...
ResponderEliminarPetonets, Laureta !
Artur, las llevamos en la mochila. 😊 Besos.
EliminarLa memoria tiende a mejorar los hechos.
ResponderEliminarBesos.
Alfred, entonces...acabamos inventando? Besos.
EliminarLa memoria de la felicidad es mejor no olvidarla nunca, es la que siempre debe prevalecer, dentro y fuera de todas las habitaciones. Que hayas disfrutado de tus vacaciones.
ResponderEliminarBesos dulces Laura y dulce semana.
Dulce, ya que me pongo, también recordaré mis vacaciones... que este año no han sido gran cosa. Besitos dulces.
EliminarLa memoria, dicen, funciona como un banco de felicidad.
ResponderEliminarQue la felicidad te acompañe siempre.
Besos.
Alasdemariposa, entonces la pondré a plazo fijo 😉
EliminarBesitos linda.
Texto muito assertivo que adorei ler.
ResponderEliminar.
Cordiais cumprimentos
.
Pensamentos e Devaneios Poéticos
.
Rykardo, É a verdade que sempre me acompanha.
EliminarBeijos.
Imposible olvidar. Es lo único que queda con el paso del tiempo. Los recuerdos buenos.
ResponderEliminarBeso
Erik, cuantos más, mejor. Aunque no siempre se pueda...
EliminarBesos.
Esa memoria que nos mantiene vivos y con ganas de volver a intentarlo...
ResponderEliminarAbrazo gigante Laurita querida (de regreso? hablemos algún día de estos)
Carlos Perrotti, si, ya de regreso. Como me está costando...en breve hablamos.
EliminarAbrazo inmenso.
Laura,
ResponderEliminarA memória guarda sempre as recordações. É impossível esquecer.
Recordemos os momentos mais felizes, como se fosse um renascer!
Te dejo un abrazo!
A.S, Guarde a memória do que nos fez felizes, por menor que seja.
EliminarGrande abraço.
ese espacio tuyo
ResponderEliminarbesos
Noelplebeyo, bueno, era inquilina pero lo acabé haciendo mío.
Eliminar😊
Besos.
Esa memoria que tiene que permanecer, y formar parte del equilibrio de las cosas. De todo lo aprendido y de todo lo dolido.
ResponderEliminarMe ha encantado leerte.
Besicos.
Galilea, de lo aprendido y lo dolido, me gustó eso.
EliminarSiempre haciendo equilibrio (sobre una cuerda floja) 😉
Besicos.
Saludos Laura. Solo los recuerdos quedan, aveces....
ResponderEliminarSandra Figueroa, te mando recuerdos y saludos. Por si acaso.
EliminarLos lugares, los lugares pequeños, sobre todo, sin como los olores, evocadores. De lo bueno sobre todo. Lo que uno recuerda de un hecho, aunque posiblemente este subjetivamente mejorado, es lo único que queda, no queda una versión más fea, y por tanto , lo que queda es lo real.
ResponderEliminarYo no recuerdo apenas las caras, las voces me suenan, pero difícilmente las identifico, las fechas...puedo fallar más de 19 años al datar un acontecimiento, pero los lugares me quedan, aunque no sean importantes. Yo trabajo por las casas, visitó 5 o 6, cada día, y siempre recuerdo si he estado antes, aunque haga años
Me alegro que reaparezcas
Besoss
Gabiliante, me pasa también, trabajo visitando clientes y recuerdo todas las casas en las que he estado. Ni su nombre, ni su cara...jajaja
EliminarBesos.
Cuantos recuerdos me trae tu relato de hoy.
ResponderEliminarSaludos mediterráneos.
Enrique T.F, creo que tengo que darte la bienvenida, si no es así perdona, ando muy despistada últimamente y no recuerdo si habías comentado alguna vez. Saludos desde el mismo lado del mar.
EliminarNo olvides nunca donde fuiste feliz.
ResponderEliminarEsos recuerdos son refugios para el corazón.
Besos.
Toro, Joaquín Sabina dijo: “Al lugar donde has sido feliz no debieras tratar de volver”.
EliminarCreo que no estoy de acuerdo con él...
Besos.
Gracias a la memoria de la felicidad, que nos salva de la realidad en ocasiones.
ResponderEliminarBesos.
Devoradora de libros, AJO, una poeta que me gusta mucho dice:
Eliminar“Esto supera la ficción, debe ser la realidad”
Besos.
Laura, un placer leerte como siempre.
ResponderEliminarEn esa habitación solo quedan los rescoldos de un tiempo mejor, de recuerdos felices se alimenta la nostalgia.
Un abrazo.
Ángel, tengo sobrepeso entonces 😊 y lo digo en verdad... jajaja
EliminarBesos.
Profunda confesión amiga...
ResponderEliminarSe ve que las vacaciones en la españa profunda te han sentado bien!
Abrazos Laura. :))))))
Ernesto, uy! no sé yo... para mi esto no son vacaciones. Descanso sí, pero no desconecto. Y este año estudiando aún menos.
EliminarBesos.
Cuando más nos la arrebata el tiempo más te aferras a ella, duele perder lo que se quiere, lo que te hace feliz, la memoria con el recuerdo nos vuelve a traer lo que nos hace felices, lo que nos hizo felices y en la falta y en la distancia del tiempo es un bálsamo un alimento, un ungüentos que como buen ungüento da dolor, pero cura.
ResponderEliminarLo peor de todo es la distancia que marca el tiempo, lo va robando todo, despacio, en silencio, cada día, cada noche se te escapa un poquito más y te llenas de impotencia y vacío que solo si te aferras a esa terapia de recordar, de no olvidar puedes seguir adelante.
Un abrazo.
Agapxis, empiezo a tener serios problemas con la memoria, no sé si es despiste u otra cosa, lo que sí es cierto es que cada vez recuerdo menos y eso me pone triste porque como bien dices me hace sentir impotente. Por eso, cuando tengo un recuerdo, sea del tipo que sea, me regodeo como una salvaje.
EliminarUn abrazo.
La memoria de la felicidad...esa que duele cuando la perdemos. Alguna vez he pensado que esa protección que sentimos, esa seguridad, es un poco la responsable de que nos duela soltar amarras donde hay más ausencia que otra cosa.
ResponderEliminarUn abrazo Laura!
Leles Miva, ausencias, ya no solo de personas sino también de cosas. Nada ni nadie está en el mismo sitio donde las dejé... Besitos linda.
EliminarMe encantó, amiga
ResponderEliminarUn abrazo
Gracias Albada, beso grande.
EliminarGreat blog
ResponderEliminarRajani, Thanks.
EliminarNo parece mentira, se entiende esa felicidad expresada.
ResponderEliminarAlexander Strauffon, si no lo parece es porque tú también la sientes 😉 Besos.
EliminarUna pequeña habitación puede ser un mundo inmenso.
ResponderEliminarLa memoria de la felicidad se prende y es difícil querer olvidarla.
Besos, Laura.
Verónica Calvo, un universo entre cuatro paredes (me siento un poco Alicia en el país de las maravillas)
EliminarBesitos.
"Las partículas que el recuerdo y el olvido dejan en el aire..." Pueden crear una atmósfera densa, cegadora, irritante... o pequeñas lucecitas que te hagan ver con claridad que fue lo mejor el olvido.
ResponderEliminarBss
De barro y luz, el olvido fue necesario para poder seguir adelante. Y mira que costó...
EliminarBesos.
Hay habitaciones que parecen uno mismo/a
ResponderEliminarSaludos
Don dumas, en 3D. 😊
EliminarSaludos.
La memoria de la felicidad es tremendamente selectiva.
ResponderEliminarSaludos,
J.
José A García, puestos a elegir, hagámoslo bien.
EliminarSolo lo que interese.
Saludos.
La memoria de la felicidad suena lindo, duele perderla.. besos
ResponderEliminarHanna, y tanto que duele, cada vez cuesta más encontrarla de nuevo.
EliminarBesos.
Laura,
ResponderEliminarLer-te é sempre um doce fascínio!
Uma boa semana para ti.
Besos!
A.S, Fico feliz em ser fascinante, embora, se não for, pelo menos a leitura é. 😉
EliminarBeijos.
Siempre tenemos un rincón para nosotros, para refugiarnos, donde siempre nos sentimos a gusto, preciosa prosa me alegro leerte, un abrazo desde mi brillo del mar
ResponderEliminarBeatriz Martín, rincón exquisito, en mi casa está muy bien ubicado. Cada día lo hago más mío. Besos.
EliminarBonitas palabras que me encantó leer. Un abrazo.
ResponderEliminarTeresa, me alegro si te gustó. Besos.
EliminarHay mucho amor en ti. Tienes una hermosa esencia y eso siempre te será recompensado con felicidad.
ResponderEliminarSaludos cariñosos, Laura.
Sara O Durán, recibido todo tu cariño, gracias bonita. ❤🌹
EliminarBesos.
La memoria nos deja como un fotograma, las imágenes felices, para no olvidar los lugares que nos dieron ese placer. UN abrazo, bella. Carlos
ResponderEliminarCarlos Augusto, flashes a contra luz, carretes enteros de felicidad. A mí que tanto me gustan las fotografías...
EliminarSonríe, que te saco guapo. 😉
Un abrazo.
Hola, me llamo Julio David, en mi caso aún más, como me gusta escribir sobre el pasado... Besos.
ResponderEliminarMuchas paradojas pero con final feliz. Ojalá puedas repetir diariamente el sentimiento que tuviste en esa habitación. Besitos, bombón
ResponderEliminarOscar, si porque viajar hasta allí es un poco "dificilito" ahora mismo... Así que para pensar no necesito test COVID... jajaja
EliminarBesitos amor.
Si algunas paredes hablaran!
ResponderEliminarMenos mal que guardamos los momentos dentro y no los escribimos por el gotelé. Te imaginas? Quizá debiéramos coger los plastidecor y pintar y pintar. Llenar todo de color, que los recuerdos malos son muy grises... y ese, con el blanco.... no se veían nada bien :-) , seguro que era por algo jeje.
Las cosas que vivimos, nos hacen lo que somos... y eso, bueno o malo... es una maravilla.
Sigue sonriendo! ;-)
Eme, una manita de pintura sí que necesitaba, sí... pero es que estaba de vacaciones y no era plan... jajajaaj
EliminarBesos.
El amor y la creación son las experiencias máximas de la vida.
ResponderEliminarUn texto poético precioso.
Ah... el amor. Nada hay como la simbiosis perfecta con el ser amado.
Un besito
Ana Muela, creo que necesito fusionarme pronto, es urgente... jajaja
EliminarBesitos.
Precioso ❤
ResponderEliminarGalilea, muchas gracias linda.
EliminarBesicos.
La memoria es de doble filo... lo mejor es dejar la puerta abierta a aquella habitación.
ResponderEliminarBesos,Laura.
La Zarzamora, y volver a ella siempre que pueda, aunque esté lejos, muy lejos...
EliminarBesos.